Limpiador a base de aceite VS limpiador a base de agua
Share
El mundo del cuidado de la piel coreana es muy diferente del mundo del cuidado de la piel en Estados Unidos o Europa porque desde muy temprana edad a los coreanos, tanto a hombres como a mujeres, se les ha enseñado a cuidar de su piel. Las coreanas tienen lo que se llama una rutina de 10 pasos que comienza con una limpieza de 2 pasos.
Normalmente, nos quitamos el maquillaje con una toallita y nos lavamos la cara con una espuma o gel limpiador y lo dejamos ahí. Pero bajo la rutina coreana, se supone que debes limpiar dos veces la piel, primero con un limpiador a base de aceite y luego con un limpiador a base de agua.
Ahora bien, ¿cuál es la diferencia y por qué deberías incorporar ambos en tu rutina nocturna?
Limpiador a base de aceite
Este suele ser el primer paso de la doble limpieza coreana, pero no es obligatorio comprar uno ya que es un paso opcional que puedes añadir a tu rutina. Si todavía no has incluido este tipo de limpiador yo te recomendaría que lo hicieras ya que el aceite tiene muchísimos beneficios cosméticos entre ellos la hidratación y nutrición y están repletos de vitaminas y antioxidantes que ayudan a revitalizar y rejuvenecer la piel.
Con regularidad, los aceites limpiadores están formulados con una mezcla de aceites nutritivos que ayudan a disolver todo el maquillaje, sudor, suciedad, residuos, bacterias, poros tapados, exceso de sebo y hasta células muertas. A su misma vez, eliminan las impurezas que son a base de aceite como las siliconas y el protector solar.
Según la rutina coreana de 10 pasos debes usar uno antes del limpiador a base de agua ya que los aceites limpiadores suelen atraer la grasa, disolverla y así eliminarla de los poros y la superficie de la piel mientras que los limpiadores de agua solo eliminan la suciedad de la superficie.
Existen diversas texturas entre ellos los líquidos o los bálsamos. Los aceites líquidos vienen en una botella con dispensador mientras que los bálsamos son en textura dura y vienen en un envase con una pequeña espátula y una vez entra en contacto con el calor de la piel se derriten.
Aunque es bien conocido que los aceites limpiadores no son aptos para todo tipo de pieles, esto no es más que un mito falso, solo hay que saber elegir el adecuado para tu piel. Como ya mencioné antes el aceite ayuda a eliminar el exceso de sebo por lo que es súper recomendable para las pieles grasas, mixtas y propensas al acné. Para las pieles grasas recomiendo los líquidos como jojoba, girasol, semilla de uva o rosa de mosqueta, como muchos otros. Todos estos aceites son linoleicos, un tipo de ácido graso que ayuda a eliminar el exceso de sebo o grasa sin abrumar demasiado la piel con aceite y disolver las impurezas de los poros sin taparlos algo que ciertos aceites, como el de coco, pueden hacer ya que son considerados aceites comedogénico. Para las pieles secas es mejor elegir aceites nutritivos como aguacate, oliva, argán o almendra que son considerados aceites oleicos un tipo de ácido graso monoinsaturado.
Este tipo de limpiador es muy sencillo de utilizar. Con las manos limpias y secas coge una cantidad adecuada de aceite y frótalo entre los dedos y procede a masajear lo en la cara seca por 20 min. y luego añade un poco de agua para emulsionar.
Ahora si estas dispuesta a invertir un poco te recomiendo que pruebes nuestro aceite de Dr. JmeeLab Botanical Oil to Foam Cleanser que si tienes piel grasa lo puedes utilizar como un 2 en 1 y si tienes piel seca lo puedes utilizar como tu primer paso en la doble limpieza.
Limpiador a base de agua
Al contrario de los aceites limpiadores, los limpiadores a base agua SI son necesarios sea cual sea tu rutina y son más sencillos, prácticos y baratos. Los limpiadores con base acuosa -mejor conocidos por su nombre en inglés face wash o cleanser- ayudan a remover todos los residuos de maquillaje, sudor, suciedad e impurezas a base de agua que el aceite limpiador no pudo remover. La mayoría de los limpiadores, hoy en día, están formulados para todo tipo de pieles pero hay algunas que contienen ingredientes especiales para tratar problemas específicos como los poros dilatados, resequedad, acné y la piel opaca.
Una de las características más importantes que debemos tener en cuenta a la hora de elegir un face wash es el pH que tiene. El pH va en una escala del 1 al 14 y el #7 es el neutro, todo número por arriba del 7 es alcalino mientras que todo numero por debajo es ácido. Normalmente, nuestra piel está cubierta por un tipo de manta ácida que no permite que las bacterias resistan en la piel - una de ellas son las bacterias que ocasionan el acné. Dichas bacterias si resisten en un clima alcalino, por eso es muy importante tener cuidado no cambiemos o alteremos mucho nuestro pH natural.
Vienen en 3 diferentes texturas: gel, crema y espuma. Los limpiadores en gel tienen una consistencia tipo gelatina y aunque no suelen limpiar a profundidad están altamente recomendados para pieles sensibles. El limpiador crema tiene una textura como bien dice la palabra cremosa mientras que en espuma usualmente vienen en consistencia líquida dentro de un pote con dispensador. Para las pieles grasas y mixtas te recomiendo un limpiador en gel o espuma mientras que para las pieles secas y sensibles recomiendo un limpiador en crema. Aunque, eso sí, hay limpiadores faciales que están formulados para todo tipo de pieles.
En lo personal recomiendo que lo uses como segundo paso porque no todos los limpiadores con base acuosa limpian los poros de manera profunda lo que significa que no remueven al 100% el maquillaje o la suciedad que se encuentra en tus poros.
Su método de uso es muy sencillo simplemente masajea por un (1) minuto una cantidad adecuada del limpiador en tu cara mojada para asegurarte de remover todo el aceite y la suciedad restante. Retira el jabón con bastante agua pero asegúrate de que el agua no esté ni muy fría ni muy caliente porque puedes lastimar la piel.
En nuestra página puedes encontrar dos de los mejores limpiadores a base de agua. El primero es de Etude House - Cica Balance 5.5 Foam Cleanser que contiene, como bien lo dice el nombre, un pH de 5.5. Está formulado con CICA - una mezcla de extractos de Camomila y Madecassoside - que ayuda a calmar la piel irritada y a proteger la barrera de humedad de nuestra piel. El segundo es The Saem - Healing Tea Garden Green Tea Cleansing Foam. Está formulado con extractos de semillas de cacao y té verde de Boseong que nutren la piel con antioxidants esenciales que reparan y fortalecen la barrera cutánea y restaura la humedad. Aunque ambos son en tipo espuma están formulados para todo tipo de pieles así que no dudes en probarlos.